Los palillos chinos, los famosos utensilios con los que se come en China, Japón y en muchas partes del mundo, representan una tradición milenaria que poco a poco se va considerando como una tradición cero ecológica.
Resulta que en los últimos años, por salud pública, en casi todos los establecimientos de estos países y que venden comida de dichas culturas, se utilizan palillos desechables. Para su elaboración se consumen 1.6 millones de metros cúbicos anuales de madera (cantidad con la que se llenan 553 piscinas olímpicas), principalmente de álamo y abedul, en disminución de los más tradicionales de bambú, metal, plástico o madera reciclable.
Con una producción anual del 50 mil millones de pares de palillos desechables al año, una cifra que se traduce en ocho veces la población mundial, China es el mayor fabricante de ese producto, pero no el principal consumidor, puesto que ocupa Japón, seguido de Corea del Sur y Estados Unidos.
A mediados del 2010 el Ministerio Chino de Comercio junto a otros 5 organismos gubernamentales determinaron penalizar a las compañías que fabriquen palillos chinos desechables, sin embargo hasta el día de hoy esta iniciativa no ha surgido efecto.
Si bien es cierto que los palillos desechables son muy higiénicos, se debe considerar que la mayoría de los restaurantes cuentan con lavavajillas desinfectantes, por lo que la higiene no debe ser un impedimento para que se detenga la producción de estos utensilios.
Es importante que nosotros como sociedad y habitantes del planeta, hagamos conciencia de las cosas dañan nuestra ecología, en este caso podemos tomar acciones, como dejar de utilizar palillos chinos desechables.
Resulta que en los últimos años, por salud pública, en casi todos los establecimientos de estos países y que venden comida de dichas culturas, se utilizan palillos desechables. Para su elaboración se consumen 1.6 millones de metros cúbicos anuales de madera (cantidad con la que se llenan 553 piscinas olímpicas), principalmente de álamo y abedul, en disminución de los más tradicionales de bambú, metal, plástico o madera reciclable.
Con una producción anual del 50 mil millones de pares de palillos desechables al año, una cifra que se traduce en ocho veces la población mundial, China es el mayor fabricante de ese producto, pero no el principal consumidor, puesto que ocupa Japón, seguido de Corea del Sur y Estados Unidos.
A mediados del 2010 el Ministerio Chino de Comercio junto a otros 5 organismos gubernamentales determinaron penalizar a las compañías que fabriquen palillos chinos desechables, sin embargo hasta el día de hoy esta iniciativa no ha surgido efecto.
Si bien es cierto que los palillos desechables son muy higiénicos, se debe considerar que la mayoría de los restaurantes cuentan con lavavajillas desinfectantes, por lo que la higiene no debe ser un impedimento para que se detenga la producción de estos utensilios.
Es importante que nosotros como sociedad y habitantes del planeta, hagamos conciencia de las cosas dañan nuestra ecología, en este caso podemos tomar acciones, como dejar de utilizar palillos chinos desechables.
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