Las montañas se formaron a través de movimientos en las placas
tectónicas. Al replegarse o enrollarse alteraron la corteza terrestre dando
lugar a elevaciones en forma cónica. La acción de la erosión fue moldeándolas
hasta dar, a cada una, características únicas.
En base a su origen, los geólogos las han clasificado como:
plegadas, de fallas, de cúpula, volcánicas y de meseta. Según su altura como:
colinas, montañas medianas y montañas altas. A las agrupaciones de montañas se
les conoce como cordilleras convirtiéndolas en un bello hábitat para miles de
especies animales y vegetales.
El Día 11 de diciembre se celebra el Día Internacional de las
Montañas, lugares en donde la naturaleza nos brinda la oportunidad de efectuar
actividades recreativas para todas las edades y aficiones, cuidando siempre que
la práctica involucre el respeto ecológico. Para los aficionados a la
fotografía, dibujo o pintura; para los practicantes de meditación o yoga, las
montañas ofrecen espacios únicos con posibilidades ilimitadas.
Caminatas y días de campo. Una
actividad familiar de esparcimiento que puede organizarse en los destinos
indicados para los turistas. Comida, juegos, aire puro y agradable comunicación
con la naturaleza. Se recomienda dejar el espacio tal y como se encontró al llegar:
sin restos de comida o basura porque son dañinos para la fauna y la flora del
lugar.
El senderismo es una actividad
deportiva, no competitiva, ideal para los amantes de la naturaleza. Se recorren
los caminos o veredas trazados en exclusiva para la práctica de este deporte,
debidamente señalizados en base al grado de dificultad y longitud. Su práctica
ayuda a mantener una condición física óptima y además relaja la mente y conecta
con el mundo natural. Es recomendable acompañarse por el guía, con el calzado y
equipo adecuados para la ruta seleccionada. El senderismo puede ser de unas
horas o bien acompañarse de acampada prolongándose por el tiempo que se desee.
Una eco-aventura en la que puede participar toda la familia.
El montañismo puede practicarse a
modo de competición o como una actividad recreativa y de contacto con la
naturaleza. Consiste en hacer cumbre o conquistar la cima de los diferentes
montes o montañas cuya altura puede variar, de acuerdo a la afición y
profesionalismo del practicante. Se pueden elegir ascensos con bajo grado de
dificultad y altura, hasta la conquista de complejas y grandes elevaciones.
Los deportes de montaña, cada vez más populares, incluyen también el barranquismo, consistente en bajar
hasta las corrientes de agua de los profundos barrancos de las montañas. Los
descensos vertiginosos representan un enorme esfuerzo y pericia por lo que esta
práctica requiere de técnica y equipo especializado.
Escalar es un deporte apasionante.
Puede practicarse en roca o en un recódromo, una instalación artificial
preparada para la práctica de la escalada, sin necesidad de trasladarse a una
montaña. Los ascensos y descensos requieren de entrenamiento y equipo especializado.
Su práctica es popular y peligrosa si no se consideran las medidas de
seguridad.
La carrera de montaña implica una
excelente condición física, el empleo de calzado y equipo especiales siendo un
deporte extremo practicado principalmente por jóvenes.
El ciclismo de montaña, con una
bicicleta especial, cuenta con miles de practicantes puesto que se puede elegir
la ruta, desde la familiar hasta la de alta montaña. Por último mencionaremos
la motocross, una actividad que combina la pericia con la adrenalina.
Las montañas nos brindan posibilidades enormes, desde las
contemplativas y artísticas, hasta las prácticas deportivas extremas. Involucran
experiencias de profunda satisfacción emocional y beneficios físicos
invaluables.
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