Turismo verde agua

Turismo verde agua es una actividad familiar que les encantará a los niños, al quedar atrás el frío invierno y llegar la primavera. La invitación a salir de la ciudad y establecer una conexión con la naturaleza, traducida en palabras de amor y sabiduría a través del disfrute de las montañas, el mar, los lagos o los ríos.

Un turismo verde agua que también puedes llevar a cabo dentro de la ciudad, visitando los rincones naturales, zoológicos o parques, compartiendo con tus hijos la experiencia.
Según los expertos en turismo, los destinos más solicitados en los viajes familiares son los ambientes naturales y principalmente con presencia de agua. Nos comentan que ya sea un embalse, un río, una cascada o grandes albercas, producen en el viajero la sensación de bienestar y relajación.
Especialistas interesados en descubrir el efecto que produce el agua y en especial el mar en la fisiología de los seres humanos, se reunieron a debatir el tema. En esa reunión de Mente Azul, una variedad de profesionistas discutieron del efecto curativo del agua, no visto como una medicina, sino como un elemento que equilibra las emociones y se traduce en bienestar para el cuerpo y la mente.
El Dr. Wallace J. Nichols en su libro Blue Mind, conecta de manera profunda la neurociencia y la psicología, la naturaleza y la conservación, el arte y la ciencia, la poesía y la práctica.  Las nuevas investigaciones y descubrimientos acerca del impacto del agua en nosotros están por venir. Los primeros resultados de estas investigaciones han influido ya en la salud pública, la educación, la crianza de los hijos, los negocios, la planificación costera, los viajes, el desarrollo inmobiliario, los deportes, la recreación y lo más importante, la restauración de nuestra antigua relación personal y emocional con el agua y con la Tierra.
Nuestro pasado evolutivo nos conecta con el agua, incluso, el primer medio en el que vivimos durante nueve meses fue acuático, dentro del protegido útero materno. La primeras memorias fijadas en el cerebro, aunque no sean conscientes, se relacionan con los sonidos y las sensaciones acuáticas. El agua es entonces un signo universal y se le considera como una energía femenina arquetípica relacionada con la fertilidad,  puesto que es a través del agua que los campos se llenan de vida.
Escuchar el caer de la cascada, el movimiento del río, el arrullo del mar, influye en las emociones. La combinación del azul y el verde de la selva, los valles y las montañas llena de alegría.
El turismo verde agua será entonces una experiencia familiar que dejará grandes aprendizajes, además de fortalecer el vínculo emocional entre padres e hijos.
Aprovecha el paseo para hablar con tus hijos acerca de la conveniencia y la necesidad de cuidar el planeta Tierra. A los bebés déjalos que sientan la tierra, la arena y el agua, será una experiencia memorable.