Siempre que pensamos en ser mamá o papá, traemos a nuestra mente miles de cosas que tenemos que hacer, desde pequeños hemos visto la figura de los padres como una de autoridad y como un modelo a seguir pero qué pasa cuando somos padres y nos equivocamos, ¿está bien pedirles perdón? O debemos mantener nuestra postura sin importar qué.
Lo más importante de ser papá es siempre darles un buen ejemplo a los niños, pedirles perdón cuando nos equivocamos es otra forma de demostrarles que papá y mamá también son seres humanos y se pueden equivocar.
Mostrarle a tu peque que tú también lloras, también te ríes y también te equivocas es una gran forma de poco a poco empezar a construir su carácter, ya que la manera como respondas a estos sentimientos es como el lo hará, al menos al inicio de su vida.
Pedir perdón es reconocer, con humildad y sinceridad, que te has equivocado y puede significar mucho para un niño ver que su papá o mamá también se equivocan, que no son infalibles y que a veces actúan mal.
Para poder tener hijos capaces de buscar soluciones cuando se han equivocado, hay que enseñarles que los adultos también dicen “perdón, me equivoqué ¿qué puedo hacer para solucionarlo?”. De esta forma los niños se sentirán libres de expresar sus sentimientos y no se avergonzarán por los mismos.
Necesitamos más niños capaces de reír, de llorar y de que nos expliquen lo que sienten, así se formarán relaciones entre adultos y peques más sanas y felices.
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