Las islas
del Caribe son el hogar de una gran diversidad de lagartijas., muchas de las
cuales están a punto de extinguirse, según los científicos.
Veinticuatro
especies de lagartijas, conocidas como eslizones y que nunca antes habían sido
identificadas, entraron a los libros científicos esta semana.
Los
eslizones, como los que identificó Hedges en su estudio, se cree que llegaron
de África al continente Americano hace 18 millones de años, posiblemente
flotando en pequeñas islas de vegetación, dicen los científicos.
Estos
reptiles tienen cuerpos parecidos a los de las serpientes, con escamas
pequeñas, suaves y redondas, pero son diferentes a la mayoría de los reptiles
porque tienen un período gestacional largo como el de los humanos, ya que
forman placenta y cargan a sus crías hasta por un año.
Para
descubrir esta diversidad de lagartijas, Hedges y otro investigador tuvieron
que retroceder un paso en el tiempo para reexaminar las muestras de eslizones,
conservadas en etanol, algunas hasta por casi 200 años.
Cerca
de 800 especímenes de estos eslizones de Nueva York y de museos alrededor del
mundo fueron minuciosamente reevaluados. Los investigadores revisaron las
muestras de ADN y le pusieron atención particularmente al aspecto físico de los
animales, especialmente al número y forma de sus escamas antes de determinar su
taxonomía final.
El
equipo identificó 39 tipos de eslizones, de las cuales, seis ya habían sido
reconocidas y nueve estaban identificadas, pero erróneamente nombradas desde
hace mucho tiempo. La fecha de las muestras que observaron eran del final de
las décadas entre 1880 y 1900. Aquí es donde se puede notar una gran caída de
la población. Esta investigación describe una drástica caída en la población de
estos reptiles a finales del siglo 19. Los científicos dicen que los humanos
pueden ser los culpables, específicamente en la introducción de un depredador
que no es originario de las islas caribeñas.
Los
científicos correlacionaron esta extinción masiva de eslizones y de otros
reptiles con la introducción de la pequeña mangosta india, que fue traída a las
islas del Caribe por granjeros como control biológico para las ratas en los
campos de caña de azúcar, las cuales últimamente han causado destrozos en la
biodiversidad.
Al
menos 38 especies originarias de las islas del Caribe están en peligro de
extinción, de acuerdo con el criterio de la Lista Roja de Especies Amenazadas
que publica la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza
(UICN), que es el sistema para clasificar a las especies que están en un alto riesgo
de extinción en el planeta.
La investigación,realizada por la Fundación de
Ciencia Nacional, aparece en una publicación de 245 páginas en el número del 30
de abril del diario taxonómico de Zootaxa.