Todos los seres humanos, las plantas y
animales del planeta requieren de alimento, energía y agua para crecer y vivir.
En el caso del hombre, la cantidad de recursos que utiliza dependen de su
estilo de vida.
Algunos de
nosotros, como los que habitamos en la ciudad, desperdiciamos mucha agua,
utilizamos numerosos aparatos eléctricos, consumimos alimentos que son traídos
desde otros estados u otros países, viajamos en carro y en avión, usamos muchos
envases de plástico y producimos mucha basura. Al utilizar todos estos
recursos, estamos reduciendo la superficie de bosques, praderas, desiertos,
manglares, arrecifes, selvas, y la calidad de los mares del mundo. El impacto de
una persona, ciudad o país, sobre la Tierra, para satisfacer lo que consume y
para absorber sus residuos, se conoce como huella ecológica.
Por el
contrario, la gente que habita en zonas rurales, en donde usan poco agua y
pocos aparatos eléctricos, se alimentan de sus siembras, viajan a pie o a
caballo, usan menos envases de plástico y producen menos basura, tiene una
huella ecológica pequeña.
Para saber
cuál es tu huella ecológica te invitamos a que contestes el cuestionario en Reforestemos
México o en WWF, que te dará una idea de cuánto terreno y espacio marino es
necesario para generar lo que consumes y para eliminar tus desechos, lo cual te
podrá hacer más consciente del impacto que generas al planeta.