Nuevamente nuestros amigos de la Kombi Rutera nos platican su experiencia sobre su grandioso embarazo; ¡ahora nos dan tips de alimentación!
"Cuando nos enteramos que estábamos
embarazados, todas las interrogantes se nos vinieron encima.
Y entre tanta duda, el tema de la alimentación figuraba en el primer renglón del cuaderno donde empecé a anotar un sinfín de preguntas y cosas que iba sintiendo.
Y entre tanta duda, el tema de la alimentación figuraba en el primer renglón del cuaderno donde empecé a anotar un sinfín de preguntas y cosas que iba sintiendo.
Beti, nuestra partera, no sólo tuvo
respuestas a todo sino que nos enseñó cómo alimentarnos bien en el embarazo.
Acá les comparto 10 recomendaciones
que nos sirvieron mucho:
- Consumir 5 colores distintos de frutas y verduras al día.
- Las náuseas fueron uno de los primeros síntomas que me indicaron que algo "raro" estaba pasando y para aliviarlas tomar té de jengibre fue casi la salvación.
- Ir al baño fue por momentos un suplicio, así que para evitar el estreñimiento me recomendó aumentar el consumo de fibra (como por ejemplo optar por el arroz y el pan integral en lugar del común), aumentar el consumo de líquidos, comer menos harinas y hacer ejercicio.
- Comer alimentos que contengan hierro: Betabel, chícharos, lentejas, frijoles, hojas verdes (cuanto más oscuras mejor), brócoli, semillas de sésamo, garbanzos, hígado de res, corazón de res. Y tomar cítricos para retener el hierro en el cuerpo.
- Consumir alimentos altos en ácido fólico: Apio, lechuga, espinaca, acelga, coliflor, betabel, espárragos, garbanzos, lentejas, hígado.
- Reducir azúcares y carbohidratos simples y endulzar con miel, stevia y/o panela (piloncillo, azúcar moreno o mascabado).
- Es preferible comer poca cantidad varias veces al día que hacer 3 o 4 comidas que nos llenen y nos provoque sensación de hinchazón y pesadez.
- Evitar la carne cruda y los huevos no cocidos.
- ¡Hazle caso a los antojos! El cuerpo nos habla. En Argentina solemos tomar una infusión llamada yerba mate y me considero casi mate-dependiente, sin embargo los primeros meses del embarazo no se me antojaba, y tampoco el café. Estuve con abstinencia de ambos casi hasta el cuarto mes. A cambio, quería tomar todo el día jugo de naranjas. De esta forma, pude interpretar que mi cuerpo estaba rechazando la mateína y cafeína porque seguramente tenía demasiada, y por lo contrario estaba necesitando más vitamina C.
- Estar embarazada no significa que haya que comer por dos, sino comer mejor. Pero no vale la pena sugestionarse por el peso y sobre todo SÍ vale la pena DISFRUTAR porque es un momento único e irrepetible.
Estamos convencidos de que la mejor alimentación es la que
nos proporciona la naturaleza. En ella podemos encontrar todos los nutrientes
para la mamá y el bebé que crece dentro de la panza. Y si incluso, antes de
nacer, les generamos a nuestros hijos el hábito de consumir saludable
seguramente tendremos una Generación Bio Baby interesada por llevar una
vida sana y natural."