Como mamá o
papá Biobaby estás consciente de la importancia de separar la basura. Hacerlo
en tu hogar es una forma de cuidar el mundo de tu bebé y una vez que lo hagas
un hábito, los beneficios que traerá son muchos. Al separar lo que desechas reduces los desperdicios, ahorras recursos
naturales, disminuyes la contaminación y aminoras los gases tóxicos (como el
metano) que dañan la atmósfera. Puedes comprar botes de distintos colores o
usar huacales o contenedores para cada tipo de basura. Toma nota pues aquí te
daremos unos tips:
¿Qué puede reciclarse y qué no?
El papel, plásticos,
metales y vidrio sí pueden reciclarse.
Los restos
de comida, aunque no se reciclan, pueden acumularse en un mismo lugar para
convertirse en composta y degradarse naturalmente.
El aluminio,
propiamente enjuagado, también se recicla.
Los
electrodomésticos, la ropa y otros productos inorgánicos pueden reciclarse
dependiendo de sus características.
Los
productos que contienen químicos (como las baterías) deben recibir un
tratamiento especial y deben ir en un lugar aparte.
Ejemplos prácticos para ilustrarte
- Papel y cartón: son reciclables los periódicos, las revistas, catálogos, papel corrugado, cajas de cartón (hay que desarmarlas), bolsas de papel, sobres, folders, tarjetas para recados, cuadernos y muchos derivados.
- Plástico: todo tipo de botellas, contenedores, cubetas, frascos, y recipientes. Recuerda enjuagarlos previamente. No incluyas bolsas plásticas, tapas de botellas, ni recipientes que hayan contenido aceite de motor o sustancias tóxicas.
- Aluminio: latas de refresco, latas de conservas alimenticias (bien enjuagadas), charolas y papel aluminio.
- Vidrio: botellas de vino, frascos, pedazos de vidrio roto.
El
recipiente adecuado
Como mínimo debes tener dos
recipientes para la basura: uno para los desechos orgánicos (comida y todo lo
que se biodegrada) y otro para todo lo demás. De preferencia, lo ideal es tener
un contenedor específico para cada tipo de desecho: vidrio, plástico, papel,
aluminio, comida y desechos inorgánicos (baterías y otros productos como
envolturas o resinas).
La comida puedes acumularla en un
gran recipiente y dejarla para hacer composta naturalmente.
Lo demás puedes llevarlo a un centro
de reciclaje. En muchos supermercados ofrecen el servicio, pero puedes
preguntar en tu delegación o municipio para saber a dónde ir.
Una vez más,
gracias por tomarte el tiempo de leer este post y ser parte de la #GeneraciónBiobaby!
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