El Día Mundial de la Tierra

El Día Mundial de la Tierra se celebra en muchos países el 22 de abril. El senador estadounidense Gaylord Nelson, en 1970, promovió la iniciativa para crear una conciencia acerca de los problemas que enfrenta la humanidad, debidos a la superpoblación, la contaminación y el daño ocasionado a la biodiversidad del planeta. 

Fue en la segunda mitad del siglo XX cuando iniciaron las investigaciones acerca de los efectos secundarios del desarrollo industrial y, a través de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se convocó a una serie de reuniones con representación internacional. Ahí señalaron el impacto negativo del hombre en la Tierra, debido a los procesos de desarrollo industrializados que por un lado, contribuían innegablemente al bienestar de la humanidad, pero también contaminaban y transformaban el ambiente de manera negativa.

A partir de estas reuniones se han generado propuestas para orientar el camino que la humanidad debe continuar dentro de una relación de respeto y cuidado hacia la naturaleza.

En el 2012, el diputado César Daniel González Madruga presentó ante la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, la propuesta de iniciativa de una Ley Ambiental de Protección y Salvaguarda de los Derechos de la Tierra en el Distrito Federal, ratificada por 22 diputados de todos los grupos parlamentarios. Esto significó el inicio de la defensa de la Tierra en nuestro país.

Los sistemas de vida son comunidades complejas y dinámicas de plantas, animales, micro organismos y otros seres en estrecha y dependiente relación unos con otros. En ellos interactúan las comunidades humanas y el resto de la naturaleza como una unidad funcional, bajo la influencia de factores climáticos, fisiográficos y geológicos.

La Tierra nos pertenece a todos los seres vivos, como hijos dentro de un enorme y maravilloso hogar. De ahí que las iniciativas propuestas busquen prevenir y evitar daños al ambiente y reparar los que se hubieran causado. Promover la armonía en todos los ámbitos y así garantizar una vida plena a las siguientes generaciones. Se busca asumir prácticas de producción y hábitos de consumo en armonía con los elementos de la Tierra. Minimizar aquellos daños al ambiente que no se puedan prevenir o evitar. Realizar las actividades cotidianas bajo los criterios de ahorro y reutilización de agua, prevención de la contaminación del agua, el aire y la Tierra. Protección de la flora y la fauna. Por último, la denuncia de los actos que atenten en contra los sistemas de vida sobre la Tierra.

El Día Mundial de la Tierra nos recuerda la responsabilidad y el amor que debemos profesarle porque es nuestro hogar y nuestro sustento.